Llega el invierno y debemos preparanos para no recibir la visita de seres indeseables en nuestro hogar. La tendencia popular es creer que el auge de las plagas se da en los meses más cálidos, cuando las altas temperaturas y la humedad están presentes durante la mayor parte de las horas del día. Sin embargo, es importante tener en cuenta que durante el invierno también existe un riesgo considerable de infestaciones en los hogares.

Las temperaturas bajas pueden favorecer la presencia de insectos en nuestras viviendas, puesto que son lugares cálidos y protegidos. Además, factores como la falta de ventilación y la acumulación de residuos, sobre todo de tipo orgánico, pueden ser el ambiente idóneo para que las plagas se reproduzcan y, por tanto, se propaguen.

Las plagas más comunes los meses de invierno son los roedores, tanto ratones como ratas. Estos animales buscan resguardarse en espacios interiores del frío del exterior. Mantenerlos alejados de nuestros hogares es muy importante ya que está demostrado que pueden transmitir enfermedades a través de sus excrementos y orina, además causan daños materiales importantes en las viviendas.

Para evitar su entrada debemos asegurarnos que puertas y ventanas sellan correctamente. En el caso de mantenerlas abiertas para ventilar, deberíamos tener barreras protectoras tales como mosquiteras u otros mecanismos. Además, mantener un buen estado en los exteriores de las viviendas es fundamental, evitando la acumulación de materiales, malas hierbas o deshechos.

Otra de las plagas más comunes en los meses de invierno son las cucarachas. Suelen encontrar con gran facilidad alimento y refugio y es importante detectarlas a tiempo, ya que proliferan muy rápidamente. Suelen anidar en lugares cálidos, sobre todo en las cocinas donde además tienen acceso muy fácil a agua y a zonas calientes.  Otro aspecto a tener en cuenta es la limpieza y mantenimiento de los desagües.

Si sospechas de la presencia de plagas en el interior de tu vivienda, es recomendable contactar con un profesional especializado para que pueda realizar una valoración de la plaga, diseñar un plan de acción y terminar con el problema.